MICROMUNDO NACIONAL-ONANISTA

Estimado, o no:

Mi odio no ha aparecido aún, a pesar del esfuerzo que tipos tóxicos como tú estáis haciendo. De momento, tiene mucho más peso mi dignidad y mi vocación de ser una persona que aspira a altas cotas de libertad. Que tu marco mental no acepte el rechazo y que tu síndrome de estrés postimperio te lleve a vomitar idioteces supremacistas, no es mi problema.

Es probable que el futuro os dé una enorme hostia intelectual cuando os deis cuenta de que para que haya separatistas, es necesaria la existencia de separadores. Seguid vertiendo catalanofobia en las redes sociales. Aprecio vuestro esfuerzo.

No me imagino cómo construir un relato independentista sin la existencia de tipos como vosotros. Una España llena de ciudadanos que apreciaran la diversidad lingüística, sin discursos supremacistas, no dotaría de coartadas al independentismo.

Pero seguís ahí, con la psicología del maltratador, con esas credenciales de posesión, con ese pensamiento monolítico que os autoconvence de que los españoles sois imprescindibles, de que no es posible la vida fuera de vuestro micromundo “nacional-onanista”.

SEGUEIX-ME A TWITTER