CAMPEONATO MUNDIAL DE ESTUPIDEZ

Estimado, o no, portento de la sabiduría, Premio Nobel del pensamiento universal, sinapsis de alto voltaje:

NO HAY UNA FUCKING LAW EN EL MUNDO CIVILIZADO QUE OBLIGUE A NADIE A HABLAR EN UN IDIOMA DETERMINADO. Te lo escribo en mayúsculas porque estoy gritando. Ya no aguanto tantas gilipolleces en las redes sociales. Es insoportable. He llegado al límite se saturación de cuñados, ignorantes, incultos, catetos, paletos y sujetaboinas. No es justo tener que soportar esta puñetera dictadura de la mediocridad. La gente se chupa muchos años de estudios, de experiencia laboral, de lecturas, de viajes y de crecimiento intelectual para que tipos como tú tengan un puñetero altavoz que solo berrea idioteces y que queden silenciadas las personas brillantes de este mundo porque habéis ocupado su espacio en tertulias bobaliconas, reality shows y listas de partidos políticos.

Para empezar, ¿has pensado que si fuese cierto lo que dices, si estuviésemos obligados a hablar una lengua en concreto, las personas mudas estarían al margen de la ley? ¿Te denunciará tu pareja porque haya perdido tu equipo, estés de morros y no quieras hablar? ¿Pero cómo se puede soltar semejante estupidez? ¡Es increíble!

Lo que establece tanto la Constitución como los Estatutos de Autonomía es el deber de CONOCER y el derecho a USAR las lenguas oficiales. 

Artículo 3 de tu sacrosanta Constitución:

  1. El castellano es la lengua española oficial del Estado. Todos los españoles tienen el deber de conocerla y el derecho a usarla.
  2. Las demás lenguas españolas serán también oficiales en las respectivas Comunidades Autónomas de acuerdo con sus Estatutos.
  3. La riqueza de las distintas modalidades lingüísticas de España es un patrimonio cultural que será objeto de especial respeto y protección. 

Te pongo un ejemplo: tú tienes el deber (si no te quieres que se te ponga el pajarito del tamaño de una avestruz) de saber qué te puede pasar si lo sacas a pasear y lo metes en sitios peligrosos. Pero no tienes el deber de usarlo. No vendrá un guardia urbano a tu casa a preguntarte si has usado tu pequeño calvo con una determinada frecuencia o si has cogido una Clamidia (mi princesa Disney favorita). Lo puedes tener bien escondido en tus calzoncillos de Bob Esponja hasta que te mueras. No es obligatorio usar tu cacahuete. Tampoco es obligatorio hablar castellano, francés, catalán o el idioma de los delfines. Otra cosa es que obtengas lo que necesitas. Porque si necesitas comer y solo hablas el idioma de los delfines, te tendrás que conformar con comer pescado. 

En fin, ahora entiendo que te llames átomo radioactivo. Tú veraneas cada año en Chernobyl y se te han fundido los circuitos. O eso, o es que tienes menos luces que Gusiluz borracho.